miércoles, enero 11

TENEIS QUE AVISARLE CUANTO ANTES!!!!


Una noche hace algún tiempo, un yate americano atracó en el puertito de mi aldea.
Era tarde y las tascas y comedores estaban ya cerrados. Los tripulantes del barco vinieron a pedirme ayuda, querían cenar algo.
Suelo salir todas las mañanas a recoger pescado en el mar, y eso era lo que tenía para cenar aquella noche. Y eso les di.
Cuando terminaron de cenar entablamos conversación, el capitan sabía un poquito de castellano. Me preguntó cuánto tiempo había tardado en pescar el pescado por la mañana, y ya le dije que no mucho unas dos o tres horas.
Entonces, me preguntó, como es que no has salido más tiempo, has ido más lejos y has traído más pescado?
Le expliqué que lo que había pescado era suficiente para resolver mis necesidades, no me gusta pasar en el mar más de dos o tres horas porque no me gusta madrugar, suelo jugar con mis hijos a media mañana, y despues de comer acostumbro a echarme una siesta con mi esposa. Luego por la tarde, suelo ir a la aldea de al lado a a ver a mis amigos, tomar algunos vasos de vino, tocar la guitarra y cantar algunas canciones.
En ese momento el americano me interrumpió.
A ver, señor, tengo un MBA en Harvard y le puedo ayudar. Debería salir a pescar más y traer cada día mas pescado, eso sería muy productivo para usted porque podría ir a venderlo a la aldea de al lado, lo cual le reportaría beneficios. De esta forma, usted podría comprarse un barco mayor.
Me pareció un comienzo interesante así que le pedí que me contara más. El hombre animado por la cena y el vino siguió hablando.
De esta manera, usted podría seguir pescando cantidades mayores de pescado y los beneficios serían mayores cada vez, de esta manera, podría comprarse un segundo y un tercer barco. Así, en lugar de vender pescado en la calle usted podría negociar directamente con las cadenas de alimentación. Incluso, tal vez, abrir su propia planta. Con el tiempo usted podría establecerse en Nueva York y dirigir su imperio desde allí.
¿Cuánto tiempo me llevaría esto?, pregunté yo.
En unos veinte o veinticinco años usted podría estar dirigiendo su imperio desde la gran manzana.
¿Y después de eso?, pregunté yo.
Ahí es donde está lo realmente bueno, señor, después de eso usted será inmensamente rico, puede vender acciones de su empresa y ser multimillonario.
¿Millonario? ¿Realmente puede ser? Y después de eso ¿qué haría?
En ese momento, usted podría irse a vivir a la costa, estar con sus hijos y su familia, dormir la siesta con su esposa después de comer, y por las tardes, estando con sus amigos, beber y cantar con ellos…
Me quedé pensando y aún estoy dudando…. Si seguir el plan de mi amigo americano.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Querido pescador:

Te escribo desde Manhattan, en plena Gran Manzana. Son casi las doce de la noche, hace mucho frío (o yo estoy frío), está oscuro (o yo no consigo ver luz) y ni a esta tardía hora consigo oír el silencio. Desde hace tiempo me cuesta dormir. Cuando por fin consigo conciliar el sueño, Manuela, la mujer dominicana que limpia mi casa, me despierta con sus ruidos de cacharros en la cocina.

El único momento del día por el que merece continuar es cuando consigo cerrar los ojos y descansar, pensando con fuerza en aquella pequeña barca con la que salía a pescar. Soñando con quienes ya no podré recuperar.

Me dijeron que tendría todo lo que quisiera. Y parece que lo conseguí. Tras muchos esfuerzos y muchos sacrificios, por fin, lo tengo todo.

Pero... sólo tengo dinero.

Disfruta de tus hijos, de las siestas con tu esposa, de los vinos con tus amigos... Y de tu pequeña barca para descubrir cada mañana un trozo de mar en libertad...

Feliz felicidad, amigo pescador.

Anónimo dijo...

"Podría irse a vivir a la costa de California con Swazy,
estar con sus hijos y su familia a partir de las once de la noche, cuando salga de trabajar,
dormir la siesta en la oficina con su esposa (digooooo... con su secretaria) despues de comer en el despacho un Macsushi,
y por los fines de semana estar con sus rivales y beber y discutir con ellos a ver quién tiene más éxito y más dinero"

Lo mismo que tienes ahora, pero sin los adornos.

Anónimo dijo...

Es verdad.
Puedes vivir a tope, disfrutando toda la vida al maximo, sin pensar en la semana siguiente. Preocupado solo por tus necesidades inmediatas.
O puedes ahorrar mogollon hasta tu jubilación y entonces disfrutar de todos tus esfuerzos, pero este ultimo método tiene una pega: igual no llegas o igual no disfrutas tanto como lo hubieras hecho de joven.
Para obtener grandes beneficios hay que arriesgar, y hace falta ser valiente para ser feliz.

Anónimo dijo...

¿Pero qué es tener grandes beneficios? ¿¿¿¿Tener mucho dinero????? Igual eso es lo que nos han enseñado... Y ése el problema.
Lujo puede ser comprarse un reloj de medio kilo y conducir un cochazo de 15 kilos. Pero lujo también es poder disfrutar de muchas "pequeñas" cosas... Y la mayoría de ellas no se pueden pagar con dinero.

juan dijo...

Es genial y tremendo a la vez, por que esa es por desgracia la vision del triunfo o del exito q se tiene.
Me recuerda a la reina roja de alicia en el pais de las maravillas, hay un mamento q alicia tiene que correr con toda su alma para conseguir quedarse en el mismo lugar. Esto es un poco parecido,te ofrecen una larga vida de sacrificios para conseguir lo q ya tienes.

Anónimo dijo...

Para obtener grandes beneficios hay que arriesgar, y hace falta ser valiente para ser feliz.
Pensarais como pensaseis colegiríais con tiglat. en esta frase, y aqui va la explicación:

Pienses como pienses(como el mba o como el pescador) esta frase te da la razón.

En el primer caso, es arriesgarte a perder tu inversión. Si tu ideal de felicidad es conseguir mucho dinero, tendrás que ser valiente para arriesgar lo que ahora tienes, pero esperas una felicidad mayor en el futuro.
Se parece un poco a la idea que tengo de la vida eterna (religion).No pierde nunca la esperanza de ser inmensamente feliz,aunque no quede nada que esperar excepto ser digerido por los gusanito. Y para eso debes exigirte una vida llena de sacrificios,malqueriendote continuamente.
Habría también que cuantificar la felicidad que aporta la esperanza.

Otra manera de pensar,la que tiene el pescador es creer que si no disfrutamos ahora, nunca vamos a disfrutar. También es arriesgado el no preparar un colchon en caso de caida.

Supongo que cada uno tenemos nuestro termino medio. agur

Anónimo dijo...

Estoy de acuerdo contigo en la frase. Sólo la había analizado desde uno de los puntos de vista. Muy bien, tiglatpileser.

Me ha gustado mucho lo de cuantificar la felicidad que aporta la esperanza. Interesante. Me gusta.
Gracias.